Pilar Domínguez Toscano, profesora de la Universidad de Huelva es la directora del curso “Arteterapia para la gestión emocional y la realización personal” que se está celebrando en la sede de La Rábida desde el día 22. Para los alumnos de esta edición es -según sus palabras- “una experiencia insólita y gratificante, porque estamos trabajando con las emociones”.
Este curso, en el que participan un total de 40 alumnos es, junto al de la semana pasada relacionado también con las emociones, el que más alumnos tiene. “El éxito de este curso es que estamos hablando de emociones, que entran en ti y reaccionan sin que tú lo sepas. Por tanto, se trata de averiguar esas emociones, reedireccionarlas y medirlas, no solo a través de las artes plásticas, sino también a través de la literatura y de otros lenguajes que nos permitan entrar en esas zonas cerradas”, ha dicho.
Para Domínguez Toscano las emociones es la gran asignatura pendiente del sistema educativo. “No sabemos qué hacer para que las autoridades se den cuenta de la importancia de las emociones y lo incluyan en el sistema educativo. De todas formas, vamos poco a poco dando pasos. El año pasado casi todos los alumnos eran estudiantes de Bellas Artes, este año son solo tres. Los demás, son médicos, psicólogos, profesionales, etc. esto poco a poco se está extendiendo.
En cuanto a que puede parecer una moda los libros y cursos de autoayuda, Toscano ha comentado que la Arteterapia surgió en los años 70 y actualmente es una formación reglada en grados y postgrados, en España y en Europa. “Afortunadamente las emociones se van incorporando a todos los ámbitos de la vida y esto gracias al trabajo riguroso que se está haciendo desde hace muchos años”.
La profesora, Pilar Toscano ha dado a conocer el trabajo que se está haciendo en los geriátricos con los mayores que padecen alzheimer. “Los mayores son los grandes abandonados. Estamos trabajando con ellos las emociones. Si bien el alzheimer es una enfermedad incurable, pero estamos trabajando con estos enfermos para conseguir desacelerar el proceso de deterioro. Intentar que la vida que le quede sea mejor. Este trabajo, está contrastado y lo hemos hecho en una residencia de mayores en San Juan del Puerto (Huelva)”, ha concluido.
Durante los días del curso los alumnos practican danzaterapia, dramaterapia, terapia artística, musical y a través de la literatura al servicio de la realización personal.
